Cómo estudiar, 5 consejos para no morir en el intento
Bueno, bueno, bueno. En este caso y en este post me voy a permitir el lujo de compartir contigo una serie de consejitos para ayudarte a saber cómo estudiar y para que te sea más productivo. La verdad, es que nunca he sido una lumbrera pero bueno, tampoco me ha ido mal del todo. He ido aprobando (medio holgadamente) y tampoco he muerto en el intento.
Punto de partida
La conclusión a la que llego, que tampoco es para tirar cohetes, es que a la hora de estudiar es más importante la eficiencia que la cantidad de horas. Como en la mayoría de los casos, si nos frustramos y cansamos, no rendiremos lo mismo que si lo hacemos de una manera que nos ocupe menos tiempo y que sea más efectiva. De ahí que nos hagamos las siguientes preguntas: ¿Es mi manera de estudiar la mejor? ¿Estoy teniendo los mejores resultados que podría obtener? ¿Malgasto mi tiempo?
Para ayudarte, aquí te dejo unos consejos para saber cómo estudiar de una manera que optimice tu tiempo y el esfuerzo:
1. Más sesiones de estudio pero más cortas
Es mejor establecer sesiones de estudio cortas con ratitos de descanso. Lo que intentaremos es tener nuestra concentración a tope en cada rato de estudio y para ello necesitamos descansar. Lo ideal sería establecer sesiones de 30 minutos a 1 hora, con intervalos de descanso de 5-15 minutos.
Ah bueno, y algo que a lo mejor es un poco más difícil de llevar a la práctica (a mi me costaba un montón), duerme bien. El cerebro necesita pasar la información de la memoria “RAM a ROM.”
[bctt tweet=”Nunca te tomes el #estudio como un deber. Es una oportunidad para adentrarte en el maravilloso mundo del #conocimiento.” vía=”080Formacion”]2. Haz anotaciones a modo de resumen en sucio
No basta con subrayar. Yo he llegado a subrayar los libros hasta 3 y 4 veces, una cada vez que lo estudiaba. No está mal, pero aparte de guarrear los apuntes y los libros, al final no se retiene la información de la misma manera. Lo práctico es subrayar e ir resumiendo en un folio a “sucio” la esencia de lo que acabas de leer. Escribe frases que te ayuden a condensar al máximo la información y haz esquemas que te ayuden a ver el conjunto de una manera más visual y que te permita ir conectando ideas.
Es bastante efectivo, yo gasté bastantes folios y bolis pero vale la pena, créeme.
3. Desconéctate del resto del mundo
¿Demasiado obvio no? Pero no está de más recordarlo porque hoy en día es muy fácil distraerse. Con el móvil nada más ya tenemos una gran trampa, que si Whatsapp, que si Facebook, que si Twitter, etc. Puedes optar por ponerlo en modo avión o en riguroso silencio, es mejor quitarse la tentación. Otros quizás prefieren estudiar mientras tienen la TV de “fondo”, pero es muy peligroso también.
En mi caso, yo me distraigo hasta con una mosca y recuerdo que antiguamente estudiaba en mi escritorio, todo formal y todo muy bien…¡Pero! Tenía una hermosa ventana delante, que sí, que me proporcionaba una luz natural perfecta, pero no me ayudaba nada a concentrarme. Me distraía viendo los pajaritos volar, los coches pasar o la gente hablar. Evítalo también si es tu caso.
Recuerda que vas a estudiar períodos cortos, así que tampoco es para tanto estar aislado un rato.
4. Busca alguien y explícale lo que has aprendido
Tal cual. A tus padres, a tu hermano/a, a tu pareja, a un amigo, a un compañero/a de clase… ¡A quien sea! La cuestión es que encuentres a alguien a quien le puedas explicar con tus palabras lo que has aprendido. Esta es la mejor fórmula de todas. Al hacerlo, asimilarás mejor el contenido, ya que repasarás mentalmente lo que has aprendido y lo expresarás de una manera entendible para otros.
Te ayudará a hacerte un auto-examen, así también podrás darte cuenta de qué cosas te sabes bien y qué cosas tendrás que volver a repasar.
5. No memorices de “carretilla”
Conforme vayas estudiando haz tuya la información. Para ello, intenta relacionarla con algo que luego te sea fácil de recordar: Vivencias tuyas, personas, ejemplos, ilustraciones, etc. Explícalo en tus palabras, no intentes memorizar palabra por palabra. Si te olvidas de una, todo se puede ir al garete; además se te hará más meterte toda esa información en la cabeza.
Intenta establecer similitudes y relación entre conceptos. Podrás conectar todo mucho mejor y con más sentido. Estudia en un ambiente tranquilo, organizado y con todo lo que necesites. Así no tendrás que levantarte innecesariamente y perder la concentración.
Bueno ya a modo de conclusión, tranquilo/a, los nervios excesivos no son para nada productivos. ¡Todo irá bien! Ahora ya sabes cómo estudiar.
Si ahora mismo no estás estudiando y te interesa formarte te animo a que te informes sobre los certificados de profesionalidad. Son una gran puerta abierta en la formación.
Si te ha gustado ya sabes, ¡comparte y que llegue hasta Marte!